Descripción
Para comprender el concepto de justicia social, debemos aceptar que, además de considerar las formas normativo-jurídicas, se deben involucrar aspectos morales, culturales y económicos. Es necesario buscar formas de justicia social flexibles, plurales y críticas que se ajusten a las realidades de desigualdad de hoy en día, sin olvidar incorporar este concepto a una dimensión política, económica y cultural; así como formular un proyecto en donde a la distribución del ingreso y condiciones económicas se le sume el reconocimiento de la identidad y la posterior representación de esas identidades, como las minorías afectadas, en la vida política de la sociedad.
Para tener una genuina justicia social, se debe crear una atmósfera de entendimiento del problema, a través de una educación firme basada en valores, que tome de la mano al estudiante y lo sumerja en las necesidades sociales, económicas y políticas del mundo para sensibilizarlo y motivarlo a luchar por un cambio positivo de estructuras. La tendencia es lograr la equidad en los derechos fundamentales de las personas. El poder siempre, por tanto, debe ir acompañado del concepto de obligación de servicio.